Exitosísimo escritor estadounidense que no se mide en palabras si no en cifras: 80 millones de ejemplares vendidos de El código Da Vinci, su cuarta novela; y 758 millones de dólares en taquilla de su versión cinematográfica. Dan Brown, un escritor reconocido mundialmente; muy joven y muy exitoso; pero también muy criticado.
Como datos básicos: Nació en 1964, y el próximo 22 de junio cumplirá 46 años. Es hijo de un matemático ganador de varios premios científicos, y de una madre intérprete y compositora de música religiosa. Este no es un dato menor, ya que en sus libros está muy presente la tensión entre la religión y la ciencia.
Después de recibirse de Licenciado en Literatura Inglesa, decidió seguir el camino de su madre y comenzó una carrera musical. Así fue que se dedicó a crear efectos sonoros con teclados electrónicos. Grabó un primer disco para niños, que imitaba los sonidos de los animales de la selva, y luego otro, más elaborado, destinado a los adultos.
Por eso Brown se trasladó a Hollywood para convertirse en un músico profesional del cine y llegó incluso a inscribirse en la Academia Nacional de Compositores de Los Ángeles, donde conoció a la que sería su esposa, que es pintora e historiadora del arte, y colabora con el autor en la construcción de sus relatos, aportando la verosimilitud requerida por las tramas de los libros que en general implican bastante datos históricos.
Pero como no tuvo éxito con la música, Brown decidió regresar a su pueblo natal para trabajar como profesor de Literatura inglesa; hasta que en 1996 decidió dedicarse a la escritura.
Su primera novela fue un tecno-triller: La fortaleza digital (1998), cuya trama versaba acerca de intrigas alrededor de la Agencia de Seguridad Nacional de los Estados Unidos. Este libro fue recibido con entusiasmo comercial, pero recibió muchas críticas por su superficialidad y deslices en el tratamiento tecnológico.
Luego aparece la segunda novela de Brown: Angeles y Demonios (2000). En este libro aparece por primera vez el personaje de Robert Langdon, que es un profesor de simbología y arte religioso en la Universidad de Harvard, que investigando un misterioso símbolo se encuentra con una secta denominada Illuminati, que es una Hermandad nacida en la época medieval y que está enfrentada con la Iglesia Católica.
En el 2001 aparece la tercera novela de Brown: La conspiración. En este libro la trama se centra en el descubrimiento de la NASA de un extraño objeto en el Ártico.
Estos tres primeros libros tuvieron un éxito relativo. El éxito editorial llegó en el 2003 de la mano de su cuarta novela: El código Da Vinci, que rompió records de ventas con más de 80 millones de copias vendidas y que fue traducido a más de 50 idiomas. La historia de este libro se centra en la búsqueda del significado real del Santo Grial, un enigma cuya resolución podría cambiar el basamento de la historia del cristianismo. En esta novela, Brown recupera al personaje del profesor Robert Langdon, quien debe solucionar un misterio relacionado con una sociedad secreta conocida como el Priorato de Sión.
Tan arrollador fue el éxito alcanzado por esta novela, que en el 2006 fue adaptada y llevada al cine bajo el mismo nombre. La película fue dirigida por el reconocido director cinematográfico Ron Howard (ganador del oscar por mejor dirección en el 2001 por “Una mente brillante”), y protagonizada por el también multipremiado actor Tom Hanks, que en la película le da cuerpo y vida al Profesor Langdon.
Y fue tal el éxito alcanzado por esta película -que recaudó alrededor de 750 millones de dólares- que con posterioridad, en el 2009, se estrenó otra adaptación de un libro del autor, en este caso basada en Ángeles y Demonios, también dirigida por Howard y protagonizada por Hanks.
La verdad es que después del increíble nivel de venta de ejemplares de El Código Da Vinci, y luego del éxito de taquilla de la película, la popularidad de Brown llegó a la cima, lo cual llevó a la reedición de sus trabajos anteriores que hasta entonces habían pasado desapercibidos.
Después de El código Da Vinci, en el 2009, Brown publicó su quinta, y -por el momento- última novela: El símbolo perdido, cuya trama versa acerca de la masonería, y nuevamente tiene como personaje central al Profesor Langdon, quien en esta oportunidad deberá salvar la vida de un viejo amigo y evitar que un secreto muy bien guardado caiga en malas manos.
El Código Da Vinci además de ser un éxito de ventas, impulsó un curioso fenómeno: la publicación de numerosos libros de autores que desafiaban (o que habían desafiado a lo largo de la historia) la doctrina oficial de la Iglesia acerca de Jesucristo, María y otras figuras del cristianismo.
También podría decirse que si bien Brown es un escritor que sabe cómo alimentar el apetito de un lector ávido de teorías conspirativas, también ha generado muchas controversias. Una de las tantas voces críticas de la literatura de este autor dijo: “Dan Brown es un agitador que difunde falsas noticias". ¿Y quién dijo esto? Lo dijo nada más y nada menos que el reconocido semiólogo italiano Humberto Eco.
Y las fuertes críticas de Eco a Brown no fueron ni las primeras ni las únicas dentro del mundo literario, también el prestigioso crítico norteamericano, Harold Bloom relativizó el valor de la obra de este autor afirmando que la de Brown es “literatura Light”.
Además de las voces detractoras que se oyeron dentro del ámbito literario, en mayo de 2006, en Italia, mientras la película “El código Da Vinci” se exhibía en alrededor de 900 salas cinematográficas, imponiendo un record de taquilla, se produjo una protesta en la que se quemó públicamente un ejemplar del libro. Los dirigentes que encabezaban esta protesta dijeron que protestaron “frente al repugnante intento del libro y de la película de negar, con mentiras y sin pudor, los dogmas de nuestra fe, reduciendo el mensaje cristiano a un triller hollywoodense”.
Para finalizar, algunos datos: El símbolo perdido, su último libro, desde su lanzamiento en octubre de 2009 hasta la fecha, en Argentina se posiciona dentro de los cinco libros más vendidos; actualmente se encuentra en el tercer puesto, pero vale destacar que estuvo durante mucho tiempo en primer lugar. Otro dato interesante es que este útlimo libro de Brown tuvo en nuestro país una tirada inicial de 100.000 ejemplares, una cifra que sólo pueden permitirse probados best sellers locales.
Como último dato, Dan Brown, tras la publicación de El código Da Vinci obtuvo beneficios anuales por alrededor de 80 millones de dólares; y con semejante nivel de ingresos, de la noche a la mañana pasó a integrar el universo de los escritores norteamericanos más ricos y famosos.
Para muchos Dan Brown no es un escritor original ni tampoco brillante, pero cabe preguntarse: ¿Cuál es entonces la razón de su éxito? Y la verdad es que no hay una respuesta que pueda explicarlo. Para comprender la falta de lógica del éxito editorial de este autor vale la pena recordar que tampoco es posible dilucidar por qué en lengua española, después de Cervantes, la autora más leída es Corín Tellado. Y con este criterio, ¿podría decirse que en literatura de lengua inglesa, luego de Shakespeare, el autor más leído es Dan Brown? No es posible afirmar esto, pero tampoco es posible negar que ya es un fenómeno indiscutible de nuestro tiempo.